Oscar Noel Herrera Blandón

42 Años - Abogado

Oscar Noel Herrera Blandón

“Vivir en un país libre, sin hipocresías, sin sangre derramada”

Asesinado en Jinotega el 7 de octubre de 2018

 

Oscar Noel Herrera Blandón tenía 42 años cuando fue asesinado. Procreó siete hijos. Uno de ellos, Russel Jacob Herrera Osorio, dice que tuvieron una relación muy bonita pues su papá siempre estaba para él. Desde muy pequeño lo apoyaba, jugaba con él, lo sacaba a pasear, le enseñó a estudiar, a trabajar y sobre todo a andar por el buen camino. Todo eso él se lo agradece.

Russel describe a su padre como un hombre muy trabajador, que laboró como dentista de los 17 a los 30 años, y al terminar su carrera de Derecho comenzó a trabajar como abogado. Además se desempeñaba como agricultor en una finca de su propiedad.

Cuando el Partido Liberal Constitucionalista (PLC) ganó las elecciones municipales en Wiwilí, Jinotega, Herrera fue contratado como asesor legal. Combinaba ese trabajo con su pasatiempo favorito: era poeta, publicó una novela y estaba escribiendo un segundo libro, titulado “Santa Clara”, que no pudo concluir.

De acuerdo con Russel, su padre “era sencillo y a la vez elegante, inteligente, de mucho carácter. Tenía buenos sentimientos, un buen corazón, y si podía ayudar a alguien siempre brindaba su mano a la persona que lo necesitara o lo buscara”.

Sobre los sueños y propósitos de su padre, dice: “Él quería que viviéramos tranquilos, sacar al régimen orteguista del poder y vivir en un país libre, sin hipocresías, sin sangre derramada de gente inocente. Para él su familia era un tesoro y deseaba que sus hijos siempre estuviéramos bien, y creo que lo logró, porque estuvo con nosotros en todo momento”.

La familia de Noel Herrera siempre fue de ideología liberal. Su legado, afirma su hijo, “fue ser siempre un hombre de lucha, valiente, dispuesto, que nunca tuvo miedo a las amenazas y decidió morir por su pueblo. Él pensaba que cuando la tormenta viene hay que sobrevolar en ella, y pienso que debemos aprender de la valentía que tuvo para luchar por la libertad”.

Noel Herrera apoyó las protestas sociales desde el 19 de abril de 2018, participó en el tranque La Marañosa y en los meses siguientes comenzó a recibir amenazas de muerte por distintas vías. Russel piensa que su padre “se confió mucho” y por esa razón fue asesinado de un balazo en un bar por un paramilitar.

“La pérdida de mi padre generó un gran vacío en mí, al punto de no creer hasta verlo en el ataúd. Quiero que se haga justicia, que el delincuente pague por el daño físico y emocional que ha causado, que este crimen no quede en la impunidad y el olvido”, dice su hijo.


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